Nick Brandt, un fotógrafo profesional, ha dedicado su última exposición a un lugar muy peculiar, la orilla del Lago Natro en Tanzania. Puede que la orilla de un lago no sea algo que levante la expectación de muchos fotógrafos, pero el interés de Brandt fue más allá. Y es que este lago está compuesto por carbonato sódico y sal, lo que hace que los animales que mueran en él se calcifiquen. “El carbonato sódico y la sal hacen que las criaturas se calcifiquen y se conserven perfectamente a medida que se secan”, relata Brandt en su libro ‘Across the Ravaged Land’.
El lago Natron es un lago salado endorreico africano localizado en el Gran Valle del Rift, en Tanzania, en la frontera con Kenia. Junto a él se encuentra el estratovolcán Ol Doinyo Lengai. Su superficie aproximada es de 600-800 km², aunque puede llegar a alcanzar los 1.040 km², y de él se extraen sales de cloro, sodio y magnesio. Sus aguas están teñidas de rojo por la proliferación de algas. En él se pueden apreciar formaciones de espirales de carbonato sódico que surgen de las profundidades de la tierra a través de géiseres. Estas espirales decoran la superficie de sus aguas, así como la sosa se acumula en las orillas como una espuma blanca. Sólo los flamencos sobreviven en este peculiar ambiente, ya que devoran las algas filtrando las aguas alcalinas gracias a su pico.
Lago natro vista satélite |
Brandt pensó que este ecosistema, que llega alcanzar temperaturas de hasta sesenta grados, era tan especial como para formar parte de su libro. Cogió aves muertas y las colocó en la misma forma que hubieran estado si siguieran vivas. “Nadie sabe con certeza la forma en que murieron, pero parece que el extraño reflejo que produce la superficie del lago los confunde”, dice el fotógrafo.
Pero no sólo de animales muertos se basa la obra de este fotógrafo, su obra también incluye fotografías de animales paseando por la sabana y realizando su vida. Su libro es el tercer tomo de su serie de animales en peligro de extinción en África. También es el último. Su obra ya está completa. Esta exposición puede verse hasta el 5 de noviembre en Nueva York, en la Hasted Kraeutler Gallery.